
Los paparazzis captaron el cabello enredado de la artista, que al parecer era producto de una mala aplicación de extensiones de cabello, y que se hacían visibles debido a la diferencia de tonalidades en su pelo.
Su vestuario era igual de sorprendente: vestía un chaleco de color mandarina, shorts color beige y botines marrones, quizá tratando de remediar el desastre fashionista.
La intérprete de "Toxic" es criticada por sus malos aciertos en cuanto a la moda, incluso ahora que es imagen de una marca de ropa muy conocida.